Emparejar la balanza

Columna publicada el martes 06 de noviembre de 2018 en la edición impresa y digital de Milenio Laguna.

Por: Verónica Rocha

A tres meses de la jornada del Proceso Electoral 2017-2018, se desarrolló la Mesa de Trabajo: Evaluación sobre la implementación de medidas incluyentes para personas con discapacidad.  Ahí se mostró el Informe Preliminar sobre las personas con discapacidad.

Los datos, varios, entre ellos conocer que del 100% de los formatos para Registro de personas con discapacidad que acudieron a votar en cada una de las 156 mil 793 casillas solo se lograron recuperar 41 mil 218  lo que representa el 26.29%,  o sea ni la tercera parte.

Del universo de formatos recuperados solo 17 mil 128 contienen información es decir el 10.92%, mientras 24 mil 090  no, lo que corresponde al 15.36%.

Otro dato, de los 18 mil 299 cargos que se eligieron en las elecciones 2018, solamente 61 personas con discapacidad fueron registradas como candidatos y candidatas en los comicios federales y locales. De las 61 candidaturas solo 19 resultaron ganadoras, 11 son propietarios y 8 son suplentes.

Además, en las elecciones federales de este año los Partidos Acción Nacional y Verde Ecologista de México no postularon a candidato alguno con discapacidad, mientras que en la local fueron el de la Revolución Democrática,  del Trabajo y Encuentro Social.

Ahora que inició el Proceso Electoral Local 2018-2019 en Durango para la renovación de los 39 ayuntamientos el 2 de junio de 2019, el consejero electoral del Instituto Electoral de Participación Ciudadana (IEPC) Durango Omar Ortega compartió en entrevista para Telediario Durango las acciones afirmativas en el tema de género donde se asegura el 50% de candidaturas para las mujeres así como  encabezar la lista de regidurías.

No precisó si en éstas, también están contempladas aquellas que aseguren y garanticen la participación de las personas con discapacidad no solo en la emisión del voto o su participación como funcionario de casilla sino también como candidatas.

Hace falta emparejar la balanza en favor de las personas en situación de vulnerabilidad y es una oportunidad de oro para hacerlo con las personas con discapacidad. PrimeroPersona